lunes

Black Swan

He desaparecido. Me he evaporado, como quien dice. Si se tiene en cuenta la pérdida de consistentes quizá más 8 kilos en tres meses no está mal. Nada mal. Pero hablemos de Black Swan, de los cisnes negros revoloteando dentro y fuera de nuestros cuerpos, alrededor de nuestras cabezas, dándole cuerda a mi elocuencia y a mi amplio desparpajo y exhibición de gilipollez. Gráficamente me impactó mucho, pero la historia (y Natalie, por supuesto)...  La historia es lo importante. La metáfora literal y las identificaciones de mi no-persona con su sí-personaje. Podría decir muchas cosas interesantes (o no), pero prefiero recomendarla. Prefiero proponer que se vea, que se sienta, que se llore. Que se sufra, que se entienda, que se cuele en vuestros sueños y pesadillas, joder, sí, prefiero decir todo eso. Y guardar silencio para contemplar la perfección de la locura, nada más. Sólo eso.